Ciudad del Vaticano.- Aún sin la confirmación oficial de que tanto el Papa Francisco como el emérito Benedicto XVI hayan recibido la primera dosis de la vacuna contra COVID-19 de Pifzer, medios certificados ante la Santa Sede y cercanos a fuentes vaticanas aseguran que tanto el papa Francisco, de 84 años, como Benedicto XVI, de 93, habrían recibió este miércoles la vacuna en la primera jornada de la campaña de vacunación organizada para miembros, empleados y ciudadanos del país católico.
El papa habría sido vacunado "en un sector del atrio del Aula Pablo VI acondicionado especialmente" para la aplicación de las vacunas, aseguraron el diario argentino La Nación y la revista jesuita American Jesuit Review America.
El portavoz del Vaticano, Matteo Bruni se limitó a confirmar el inicio de la campaña de vacunación para los cerca de cinco mil residentes y empleados del Vaticano.
La campaña arrancó este miércoles en el atrio de la Sala Pablo VI. La prioridad fueron los agentes sanitarios del Vaticano, de seguridad pública, a los ancianos y al personal que está en contacto más frecuentemente con el público. En esta campaña serán vacunados los ciudadanos, empleados y jubilados, pero también los familiares que reciben la asistencia del FAS (Fondo de Asistencia Sanitaria). La campaña es completamente voluntaria. Por ahora, los menores de 18 años están excluidos de la vacunación porque todavía no se han realizado estudios que incluyan a este grupo de edad.
El pontífice argentino habría recibido la vacuna de Pfizer - BioNTech y "fue uno los primeros en ser inoculado", precisó el diario La Nación, aunque ninguna foto ha sido distribuida hasta ahora.
El médico personal del papa por cinco años, Fabrizio Soccorsi, murió el sábado a la edad de 78 años tras "complicaciones por el Covid-19" cuando estaba "hospitalizado por una patología cancerosa".
Francisco canceló todos sus viajes al exterior desde el inicio de la pandemia en marzo del 2020 y puso en duda la celebración de su visita a Iraq, prevista del 5 al 8 de marzo próximos.
El papa emérito Benedicto XVI, de 93 años, quien reside retirado en un monasterio dentro del Vaticano, también figura entre los primeros vacunados, según confirmó su secretario privado, el arzobispo Georg Gänswein.