Ciudad de México.- La violencia contra sacerdotes católicos en México no es un mero daño colateral de la inseguridad, sino una estrategia deliberada del crimen organizado para eliminar a "estabilizadores sociales" en las comunidades. Esta es la conclusión a la que ha llegado el sacerdote Omar Sotelo Aguilar, director del Centro Católico Multimedial (CCM), tras 15 años de investigar y documentar este fenómeno. Su trabajo revela un patrón de hostigamiento, tortura y asesinatos con niveles inusuales de ensañamiento, seguidos de campañas de difamación póstuma.
Para el religioso, el silencio y la omisión son los principales aliados de la criminalidad: "Hoy como sacerdote, pero también como periodista, tenemos el gran compromiso de seguir ejerciendo una voz profética, una voz que cambie, una voz que pueda hacer mejor algo que México no necesita y que no merece, la violencia que pasa", declara.
Esta es la razón que lo impulsa, desde su doble vocación de sacerdote y periodista, a romper ese círculo de silencio: "Sí, hay temor, pero es más grande la fe en nuestro Maestro Jesucristo para seguir anunciando y denunciando este tipo de situaciones que afectan a nuestro país. Ser la voz de los sin voz, ser un puente que nos ayude a llegar allá, a la esperanza".
Las cifras respaldan su diagnóstico. El Centro Católico Multimedial documentó que, durante el sexenio del expresidente Andrés Manuel López Obrador (2018-2024), 10 sacerdotes y un seminarista fueron asesinados. Además, el Departamento de Estado de Estados Unidos citó en su Informe 2023 sobre Libertad Religiosa Internacional un dato del CCM que contabiliza 800 incidentes de extorsión y amenazas contra sacerdotes en México en un solo año. Sotelo Aguilar señala que la cifra real de amenazas puede ser incluso mayor, rondando las 850, debido a la dificultad de recopilación.
La labor del padre Sotelo y su equipo los ha colocado en una posición de alto riesgo. "Mi país se ha convertido en uno de los más peligrosos para ejercer el sacerdocio", declaró hace tiempo al medio institucional de la Santa Sede Vatican News.
Uno de los hallazgos más graves de la investigación del CCM es el nivel de impunidad que rodea estos crímenes. El centro ha documentado más del 80% de impunidad en los asesinatos de religiosos. Sotelo critica la "ineficacia de los sistemas de seguridad federales, estatales y municipales" y la tendencia inicial de las autoridades a minimizar el problema, atribuyendo los asesinatos a la "violencia generalizada" o a defectos personales de las víctimas.

