Campeche, Campeche.- El pasado 31 de agosto comenzaron a difundirse imágenes y videos donde religiosas Servidoras de la Palabra retiran imagenes religiosas de la capilla del Hospital General de Especialidades Dr. Javier Buenfil Osorio, ubicado en la zona de hospitales del sur de la ciudad de Campeche.
En el video se ve una capilla con imágenes religiosas católicas (una Piedad, una Virgen de Guadalupe, un Divino Niño Jesús, crucifijos y otras representaciones de Cristo) e incluso se discute sobre la manera de remover un mueble empotrado donde se ha colocado un Sagrario.
La Iglesia católica local no realizó ningún comentario sobre el incidente pero, a raíz de la presión en redes sociodigitales de grupos y movimientos católicos de varias partes del país contra el gobierno de Campeche ldierado por Layda Sansores San Román, las autoridades de la entidad rechazaron que ellos hubieran mandado remover las imágenes.
Sobre el hecho, las autoridades de Campeche aseguraron "que ni la Secretaría de Salud, ni Directivos de dicha unidad solicitaron que se remueva o retire ninguna imagen religiosa; y no modificamos ninguna condición que afectara el espacio de oración y meditación del lugar".
Según el gobierno estatal, fue la asociación 'Más vida, más familia' quien instruyó el reitro de las imágenes religiosas pues, como asegura su oficina de prensa, se prohibió a la organización que colocara una placa "que delimitaría este espacio como exclusivamente católico, lo cual no está permitido por la normatividad hospitalaria".
En su comunicado, las autoridades insisten en que el Hospital de Especialidades debe contar con un oratorio 'ecuménico'; un sitio de de oración "donde puedan acogerse todas las creencias y religiones e incluso si no s tiene credo religioso alguno [pues] es un lugar que permite orar y/o reflexionar cuando se está enfrentando algún momento difícil para nuestros pacientes y sus familiares".
"En nada ha cambiado el destino y uso del oratorio del Hospital de Especialidades", insisten las autoridades civiles.
No obstante, el sacerdote Gerardo Casillas, vocero de la diócesis de Campeche, rechazó la versión oficial y afirma que fueron las autoridades de Sansores San Román las que "ordenaron desmantelar la capilla" y explica:
"Ese día celebró el obispo la Santa Misa porque se iba nombrar como patrono del lugar a san Ramón nonato. Y literal: no nació, fue debut y despedida".
El religioso asegura que dicha capilla "llevaba años abierta al culto de los fieles y servía de consuelo, oración y lugar que otorga esperanza en momentos difíciles por la enfermedad, sea del paciente o de los familiares"
Explicó además que tanto el obispo Francisco González como la diócesis de Campeche no ha emitido ningún pronunciamiento formal "ya que estamos mediando para lograr se pueda abrir como una capilla ecuménica".
Casillas también relata que en el mismo hospital existieron dos capillas u oratorios más para servicio de comunidades evangélicas o de movimientos cristianos: "Se las quitaron, pero porque no eran muy concurridas; a diferencia de la [capilla] católica".
El escándalo subió hasta la oficina del secretario de gobierno estatal, Aníbal Ostoa Ortega, quien dijo a los medios que desde el gobierno de Sansores exista una persecusión política contra la religión.
Ostoa mantiene la versión sobre que la representante de la asociación 'Más vida más familia', Nicté-Ha Aguilera Silva "quiso convertir el lugar en un espacio exclusivo para los católicos". El gobierno local afirma que, la pretención de los católicos era impedir el acceso a creyentes de otras denominaciones a la capilla de naturaleza ecuménica; y por ello, aseguró, ya se ha establecido diálogo con las autoridades diocesanas.
Aguilera desmintió al funcionario pues, asegura que el hospital llegó a tener tres capillas: "En la zona de terapia intensiva hay dos áreas gemelas: una era para la Iglesia cristiana y otra para la católica".
De hecho, justo el 31 de agosto (día de San Ramón Nonato), el propio obispo González González celebraría la santa misa en el lugar y realizaría un servicio humanitario acompañando a niños hospitalizados para llevarles jueguetes, ropa, leche y medicamentos. La misa no se realizó pues el día previo se solicitó el retiro de las imágenes.
El director del hospital, Arnulfo Trujillo Núñez, argumentó que el retiro de las imágenes católicas respondió a una instrucción superior: "Sólo acaté órdenes de arriba", dijo.
Esta capilla de oración dedicada a San Ramón Nonato, funcionaba en el centro hospitalario desde hace ocho años. La activista Aguilera Silva, quien fuera candidata al gobierno de Campeche por el Partido Encuentro Soldario (PES), comentó que el argumento de la Secretaría de Salud de la entidad para el retiro de las imágenes religiosas fue que el hospital requiere utilizar todas sus instalaciones:
"En ningún momento hemos creado ninguna confrontación, porque hemos sido muy respetuosos e institucionales; tomamos la decisión de sacar las imágenes, pues nos podían cerrar la capilla, y si no lo hacíamos no sabríamos a dónde iba a parar algo tan valioso que es el Sagrario, no íbamos a permitir que anduviera rodando", declaró.
Finalmente, la asociación religiosa aseguró que seguiría buscando la manera de atender a los internados y a sus familiares con auxilio humanitario: "porque es un tema que también se le planteó [a Trujillo Núñez], que la ayuda es para todos, sean o no católicos. Les proporcionamos lo que necesitan y que el hospital no puede darles pues ahora hay desabasto, siempre ha habido, pero ahora se nota mucho más".