Lima, Perú.- Mientras la clase política continúa con estratagemas para polarizar la asención de un nuevo régimen electo en la nación andina, los obispos católicos del país han pedido a través de un mensaje que se privilegie el encuentro y el diálogo para alcanzar la ugente reconciliación del pueblo peruano.
En su mensaje 'Con paso firme, hagamos grande nuestro Perú', los obispos católicos reconocen que el pueblo vive sufrimientos e incertidumbres por la tensión política y partidista: "La polarización extrema -dicen los obispos- crea incertidumbre y repercute en los más vulnerables y en los valores de la convivencia humana".
Frente a "la intoleracia, la indiferencia y la discriminación", los obispos ofrecen la fe y la oración como factores de reconciliación y superación de las polarizaciones existentes; pues, admitieron, la falta de diálogo y la tensión política "no deben seguir primando en nuestra convivencia".
La Conferencia Episcopal Peruana manifestó su deseo de alcanzar la reconciliación del país; situación que se agudiza por el "histórico olvido del Estado de los miles de compatriotas de las periferias del país". Además, los obispos lamentan que la crisis económica y sanitaria "acentúa las grandes desigualdades sociales y produce dolor y resentimiento".
Por ello, los pastores católicos pidieron a todos los sectores sociales a redoblar ánimos para auxiliar a aquellas personas que sufren por falta de trabajo, viven en condiciones de pobreza y que tambien padecen las dificultades educativas virtuales en tiempo de pandemia.
Por otra parte, se han referido a la situación que sufre el país a causa de pandemia de COVID-19, con el temor creciente de una tercera ola. En este sentido, los obispos han pedido al gobierno de Pedro Castillo que provea de una mayor cantidad de vacunas al país, de forma que esta llegue a toda la población.
También han solicitado que el gobierno se valga de los diferentes recursos legales de cara a proteger la libertad del país andino, en lugar de utilizarlo para un ejercicio autoritario del poder: "Orientar la democracia hacia la libertad, evitando todo autoritarismo. Hacia la igualdad combatiendo toda forma de discriminación y pobreza".
Finalmente, la Iglesia peruana ha reiterado su compromiso con el gobierno y ha ofrecido su colaboración para construir una nación más desarrollada: "Apelamos al compromiso responsable de todos los ciudadanos y en especial de las autoridades gubernamentales, para trabajar unidos por el bien común".