Ciudad de México.- Frente a la celebación del Día del Maestro en México, los obispos católicos han enviado un mensaje de felicitación a los educadores del país y, la mismo tiempo, han expresado su deseo porque el Sistema Educativo Mexicano logre vencer tres afectaciones derivadas de la crisis pandémica y algunas políticas educativas: la deserción escular, las heridas socio-emocionales y el desequilibrio formativo.

A los maestros, los obispos los animan "a fortalecer su compromiso en bien del objetivo central de la educación, que es el cultivo y formación de cada ser humano al que sirven. Seamos promotores de esperanza, de un desarrollo humano y de amistad social". 

MENSAJE ÍNTEGRO: Conferencia del Episcopado Mexicano - Mensaje con motivo del Día del Maestro 2022

El mensaje lleva por título "Unidad y corresponsabilidad para vencer desequilibrios y abandono educativo" y además de hacer un reconocimiento a todos los educadores, directivos, padres de familia y a los propios estudiantes para continuar los esfuerzos educativos durante la pandemia de COVID-19, los obispos urgen a "retomar la realidad educativa en su conjunto e impulsar la educación integral de todos".

"Es urgente que, corresponsablemente, todos los actores de cada comunidad escolar propicien las mejores relaciones educativas y el tejido social, necesarios para una nueva y buena educación, como nos lo pide el Papa Francisco en el lanzamiento del Pacto Educativo Global", dice el mensaje.

Los obispos consideran que, aunque la mayoría de los centros y agentes educativos han regresado 'con entusiasmo' a la educación presencial aún hay desafíos que se deben atender: 

"Desgraciadamente, son muchos niños, adolescentes y jóvenes, los que han abandonado la escuela, cuestión que nos debe interpelar y corresponsabilizar... es urgente responder a la exigencia de la educación socio-emocional de los estudiantes y maestros, con el fin de sanar muchas heridas...[y] hay que buscar caminos para responder al desafío de nivelar el conocimiento de los estudiantes, pues es evidente que ahora los grupos muestran más desequilibrios", menciona el epsicopado en su comunicado.

De este modo, los pastores apelan a todos los actores de la sociedad a trabajar en esta emergencia educativa mediante "lazos de solidaridad, promoción y ayuda mutua", con "acompañamiento" y enfocándose "en aprendizajes fundamentales: es momento de concentrarse más en las habilidades, actitudes y valores, que en los contenidos cognitivos".

Los obispos también llaman a reforzar relaciones comunitarias y, de manera especial, piden a las autoridades educativas federales a "apegarse al Estado de Derecho": "Nos preocupan las recientes declaraciones, de funcionarios menores, con relación al modelo y los contenidos educativos, que no tienen un sustento científico ni responden al momento educativo que vivimos, así como la desaparición de las Escuelas de Tiempo Completo, entre otros sucesos".

El mensaje concluye con un llamado a buscar "caminos de conciliación, no de confrontación; es tiempo de impulsar la tarea educativa, no sólo trabajar en su proyección o gestión; es tiempo de buscar certezas, información verídica y científica, que dé sustento y orden al Sistema Educativo Nacional"; también piden que se escuche a especialistas y a los padres de familias pues "la educación... requiere de mucha participación, de consensos posibles gracias al diálogo y al encuentro; de corresponsabilidad, que conlleva generosidad y gratuidad".