México.- Durante las celebraciones del Domingo de Ramos, el formal arranque de la Semana Santa 2022, los obispos católicos de México externaron su preocupación por el nivel de violencia en el país, por los desafíos sociales que enfrenta la nación y pidieron por la paz y la reconciliación en el pueblo mexicano.
En la mayoría de las localidades del país, la Iglesia católica mexicana ha retomado actividades celebrativas, litúrgicas y religiosas multitudinarias; el pasado domingo, fue la primera vez, luego de dos años de pandemia por COVID-19, que se contó con nutrida participación de fieles en las tradicionales celebraciones iniciales de Semana Santa.
El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, presidió la Procesión de las Palmas y ofició la Misa en la Catedral angelopolitana; en su reflexión reprobó los actos de violencia que suceden en el país y en la región. Afirmó que la vida es sagrada y que los católicos deben procurar su protección siempre; a propósito, el arzobispo elevó preces por el descanso eterno del agente investigador de la Fiscalía del Estado, José Emeterio Ortega Parra, quien murió el pasado 6 de abril en un operativo en San Matías Tlalancaleca.
Por su parte, el arzobispo de Acapulco, Leopoldo González González, llamó a la construcción de la paz en este inicio de la Semana Santa. A través de su mensaje dominical, el arzobispo recordó que en la actualidad "nuestros días han estado marcados por la crueldad de las violencias" y ejemplificó con la guerra entre naciones en el este de Europa, los asesinatos, la extorsión en el país y las violencia en el estado de Guerrero.
González González convocó a vivir la fraternidad e indicó que "aquello en lo que somos superiores, nos hagamos servidores de los demás, y con ello se fortalecerá el tejido social".
En la región norte del país, el arzobispo de Monterrey y presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Rogelio Cabrera López, llamó a las autoridades a esforzarse en proveer bienestar y seguridad al estado de Nuevo León; del mismo modo y a raíz de las desapariciones de jóvenes en la región, Cabrera pidió a autoridades y a fieles católicos acompañar a las familias que sufren angustia y desesperación:
"Recientemente se ha hecho público que, por lo menos en el mes de marzo, 15 mujeres han sido reportadas como desaparecidas... Quiero reiterar el compromiso que tenemos como Iglesia de Monterrey para acompañar a las víctimas de la violencia y el abuso. Esta semana hemos inaugurado(…) una nueva sede para la Fundación El Roble, la cual está destinada a brindar acompañamiento espiritual y psicológico a menores y adultos que han sido víctimas de abuso sexual", compartió.
En la Ciudad de México, el cardenal arzobispo de México, Carlos Aguiar Retes, dijo en homilía que el mundo sigue viviendo "las consecuencias de la Pandemia COVID y, a distancia, el conflicto aterrador de la guerra en Ucrania". Y llamó a despertar "la necesaria colaboración solidaria de la sociedad para superarlas... Revitalicemos nuestra fe en Cristo, crezcamos en la esperanza, y ante las injusticias y toda clase de violencia, sepamos siempre buscar la reconciliación y la paz".
Finalmente, el arzobispo cardenal de Guadalajara, José Francisco Robles Ortega, retomó el caso del estudiante de secundaria que se quitó la vida en Lagos de Moreno, Jalisco, por ser víctima de acoso escolar e hizo un llamado a las autoridades educativas a estar más atentas, y a los padres de familia a no perder de vista los cambios en sus hijos.