Ciudad de México.- En su primer mensaje como nuevo prepósito provincial de la Compañía de Jesús en México, el sacerdote Luis Gerardo Moro Madrid SJ propuso cinco líneas de trabajo y una perspectiva orientadora de la misión de la congregación en medio de la crisis que vive la humanidad:
“Necesitamos transitar por esta crisis que vive la humanidad con la mirada que tuvo Jesús. Para ir al encuentro del Resucitado necesitamos solidarizarnos y acompañar a los descartados por el actual orden mundial, a los condenados a muerte por la pobreza, la marginalidad, la pérdida de sus derechos fundamentales hoy acrecentados por los efectos de la pandemia”.
El pasado 18 de abril, se realizó la Eucaristía de Acción de Gracias por el nombramiento Moro Madrid como nuevo provincial de los jesuitas en México. Acompañado por un grupo reducido de miembros de la congregación y por sus padres -debido a las medidas de distanciamiento social por el coronavirus-, el nuevo provincial hizo una reflexión sobre el momento actual en el que asume dicha responsabilidad y sobre la misión que la compañía tiene por hacer en el país.
“Vivimos tiempos inéditos, inciertos y contradictorios. Celebramos la vida en abundancia que Cristo nos da y lo hacemos en un ambiente de enfermedad, temor, crisis y muerte. No obstante, las palabras del ángel en el Evangelio nos repiten: No teman, ha resucitado, irá delante de ustedes a Galilea, allá lo verán”.
En ese contexto, Moro Madrid propuso cinco líneas de reflexión y trabajo para la congregación. El primero se enfoca en la revitalización de la identidad, consolidar la identificación de los miembros a la congregación y mostrar la autenticidad en la imagen de jesuitas como provincia.
“Demos una imagen a la sociedad que sea coherente a la misión, que muestre la realidad de nuestra vocación. Reforzar y renovar nuestra identidad, nuestra identificación y nuestra imagen”.
En segundo lugar, Moro propuso consolidar el trabajo de las plataformas y redes jesuitas en México; principalmente para “renovar nuestro compromiso por los derechos humanos, los indígenas, la reconstrucción del tejido social, los proyectos de paz, los migrantes, la defensa de mujeres y niños, y la formación de hombres y mujeres”.
“Una sociedad que no garantiza el bien ser y bien estar de las personas no puede llamarse humana”.
Finalmente, los puntos cuatro y cinco se enfocarán en la promoción vocacional de la compañía como opción real de vida y en la formación especializada y profesional de los miembros de la congregación: “Urgen líderes de opinión, jesuitas que publiquen, que sistematicen experiencias y buenas prácticas, para ofrecer servicio eficaz y de calidad”.
El nuevo provincial para la Compañía de Jesús en México agradeció el trabajo de Francisco Magaña SJ y del consejo por su trabajo durante seis años al frente de la responsabilidad que ahora asume; también dio la bienvenida a los sacerdotes Jorge Atilano González como nuevo asistente sector social, José Fernando Casillas como nuevo asistente del sector pastoral y a José Francisco Méndez, socio de la provincia.
“Estos tiempos requieren lo mejor de nosotros y sé que la Compañía de Jesús tiene mucho por ofrecer a nuestro país”, concluyó.