Ciudad de México.- Por primera vez desde su fundación en 1502, la Arquidiócesis de México realizó su tradicional peregrinación anual a la Basílica de Guadalupe de forma virtual debido a la contingencia sanitaria por la pandemia de Covid-19.
La Iglesia de la Ciudad de México convocó a los fieles católicos a acompañar desde sus hogares con su oración la transmisión de un recorrido pregrabado y realizado por un pequeño grupo representativo de las zonas pasotrales de la Arquidiócesis que caminaron bajo el lema "Cristo vive y camina con nosotros".
La grabación de la simbólica peregrinación fue transmitida por las redes sociales de la Arquidiócesis Primada de México, de Desde la fe y de decenas de parroquias y grupos de laicos. La oficina de comunicación arquidiocesana explicó que este momento al inicio del año "da el banderazo de salida a todas las peregrinaciones del país a la Basílica de Guadalupe".
La peregrinación virtual que pudo contemplar la audiencia católica en las redes estuvo conformada por un puñado de fieles de las siete vicarías territoriales que representaban a todos los fieles, vicarios territoriales, sacerdotes, religiosas, religiosos, seminaristas y fieles laicos; caminaron desde la ex glorieta de Peralvillo hasta la Basílica de Guadalupe. Los participantes se alternaron a lo largo del recorrido rezando el Santo Rosario, el cual ofrecieron por los más afectados debido a la pandemia en la Ciudad de México y en el mundo, por los médicos, enfermeras y personal que trabaja en los hospitales, por los jóvenes, por los catequistas y por los ministros extraordinarios de la Comunión.
Al finalizar el recorrido de la peregrinación virtual, el cardenal arzobispo de México, Carlos Aguiar Retes, presidió una Misa en la Basílica de Guadalupe en la que agradeció a Dios: "Este año que llegamos con una grande esperanza de recuperar nuestra vida pastoral, de ir haciendo realidad el proyecto de una Iglesia sinodal en nuestra Arquidiócesis de México. Lo ponemos en manos de María”.
El cardenal invitó a los fieles a leer y meditar el Evangelio y la Biblia pues "es más que un libro de historia, es la voz de Dios, viva y eficaz que penetra el corazón del hombre como una espada de dos filos".
Aguiar Retes explicó que la Iglesia, la Diócesis, la Parroquia, está llamada a ser una comunidad de discípulos a la manera como la integró Jesús: "Capaz de invitar a otros con el testimonio de nuestra vida".
El arzobispo explicó que, aunque la Arquidiócesis asistió en peregrinación virtual al santuario del Tepeyac, realmente estuvo presente ante la Virgen de Guadalupe, "para pedirle que, como Ella lo hizo, llevemos a su Hijo Jesús a los demás, lo demos a conocer a través de los Evangelios y a través de nuestro estilo de vida, fraterno y solidario, para con todos, especialmente con los más pobres y marginados, con los enfermos y los angustiados, con los migrantes y desempleados, con los que han perdido recientemente sus seres queridos, y con los que han sufrido los daños de la pandemia".
Finalmente, el cardenal Aguiar recordó que el papa Francisco extendió el tiempo para obtener la Indulgencia Plenaria por los 125 años de la coronación pontificia de la Virgen de Guadalupe, hasta el 12 de octubre de 2021, para quienes cumplan las condiciones que pide la Iglesia para obtener esta gracia.