Ciudad de México.- Víctima de una neumonía derivada del contagio de COVID-19, la noche de el lunes 31 de enero falleció Onésimo Cepeda Silva, obispo emérito de Ecatepec; distinguido miembro del episcopado mexicano que asumió varios cargos de servicio nacional y un personaje altamente reconocido.
Falleció cerca de las 22:50 horas, luego de haberse informado que fue intubado por un contagio de COVID-19 y síntomas de gravedad; Oscar Roberto Domínguez Couttolenc, actual obispo de Ecatepec, informó sobre el deceso e invitó a todos los fieles a rezar por quien fuera el primer obispo de esta populosa demarcación mexiquense.
"Agradecemos a Dios el ministerio episcopal de monseñor Cepeda, el cual ejerció por más de 16 años, desde la fundación de nuestra amada Diócesis, anunciando con alegría el Evangelio, transmitiendo con fortaleza la gracia de Dios y sirviendo con amor a su pueblo", escribió.
Informó que se dispondrá de un novenario por su descanso en toda la diócesis: "Pidamos a Dios nos conforte por este lamentable acontecimiento, siempre en la firme confianza de la vida eterna, a la cual estamos llamados a participar después de nuestro peregrinar en este mundo".
COMUNICADO: Conferencia del Episcopado Mexicano-Fallecimiento Mons. Onésimo Cepeda Silva
El episcopado mexicano comunicó que Cepeda Silva será velado el 2 de febrero, día de la Candelaria, en el Panteón Francés de la Ciudad de México desde las 10 de la mañana: "Quien guste acompañarnos, serán bienvenidos con las medidas y protocolos ante las circunstancias que enfrentamos a causa de la pandemia".
La Conferencia del Episcopado Mexicano también aclaró que a las 16 horas del mismo 2 de febrero se realizará la Santa Misa en el panteón para que, finalmente, las cenizas del obispo Cepeda sean trasladadas hacia la Catedral de Ecatepec donde serán resguardadas hasta el 11 de febrero. La diócesis de Ecatepec confirmó que el 11 de febrero, día de Nuestra Señora de Lourdes, realizarán una ceremonia para colocar las cenizas de quien fuera el primer obispo de Ecatepec en las criptas de la catedral diocesana.
Onésimo Cepeda Silva , originario del Distrito Federal, realizó estudios de derecho en la Universidad Nacional Autónoma de México, fue corredor de bolsa, banquero y socio del empresario mexicano Carlos Slim, fundador de Inversora Bursátil, Inbursa. Recibió una vocación sacerdotal tardía y fue ordenado sacerdote el 28 de octubre de 1970 a los 33 años de edad por el entonces obispo de Cuernavaca, Sergio Méndez Arceo, apodado en algunos círculos políticos y eclesiásticos como 'el obispo rojo' por su apoyo a grupos identificados como 'de izquierda'.
Como presbítero de Cuernavaca asumió ministerios en la parroquia de Huitzilac, San Antón, Santa María y Santa Catalina; además llevó la oficina de Relaciones Oficiales entre Iglesia y Estado; fue presidente del consejo presbiteral, ecónomo diocesano, secretario canciller de la diócesis, director espiritual del Seminario de Cuernavaca, fundador y rector del Seminario Conciliar de San José. Según relata la CEM, fue además tele-evangelizador en Estados Unidos en el programa "Luz de Jesús" transmitido por 480 canales en la unión americana.
A los 58 años, Onésimo Cepeda fue nombrado primer obispo de Ecatepec por el papa Juan Pablo II y recibió la consagración episcopal el 12 de agosto de 1995 frente a la primera catedral de San Cristóbal, de manos del nuncio apostólico Girolamo Prigione, el arzobispo de Tlalnepantla, Manuel Pérez-Gil; y el obispo de Cuernavaca, Luis Reynoso.
Fue obispo de la diócesis de Ecatepec desde 1995 hasta 2012 cuando cumplió 75 años, edad canónica para el retiro.
Una de sus últimas apariciones públicas fue en abril de 2021 cuando fue promovido por el partido Fuerza por México para contender a una diputación. Cepeda asistió al registro de la precandidatura pero se retiró durante una conferencia de prensa ofrecida por la agrupación política pues, argumentó, que la candidatura supondría la pérdida de su pertenencia al colegio episcopal: "Es como si cambiara mi progenitura por un plato de lentejas", señaló.
Tanto la Iglesia católica como México tienen regulaciones para los ministros de culto ordenados que deseen participar activamente en política como candidatos.