Ciudad de México.- A la espera de la resolución que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) y el Instituto Nacional Electoral (INE) deben ofrecer respecto a la cantidad de legisladores que corresponden a las fuerzas políticas que participaron en los comicios del pasado 2 de junio, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) abogó por que la Constitución Política y la ley electoral mexicanas no sólo se interpreten a "la letra" sino desde "el espíritu de las leyes" para que se evite la "injusta sobrerrepresentación de algunas fuerzas políticas".
Los obispos católicos consideran que la conformación de la LXVI Legislatura de la Cámara de Diputados es un momento definitorio de la "joven democracia de nuestro país" la cual "es un tesoro que no puede ponerse en riesgo, pues representa la voluntad del pueblo mexicano"; por ello expresan su intercesión por "la esencia de una democracia plena" en la cual "existen 'las mayorías', pero sin menoscabo alguno de 'las minorías'... La convivencia ordenada y legal de 'las mayorías' con 'las minorías' es imprescindible para una democracia sana, es decir, ética, justa, socialmente correcta e incluyente".
MENSAJE ÍNTEGRO de la CEM: Un Congreso para todos los mexicanos
Luego de explicar cómo la existencia de los legisladores de representación proporcional benefició la participación democrática en el Congreso de la Unión e incluso propició la alternancia de poderes políticos en todos los niveles de gobierno, los obispos expresaron en primer lugar su confianza en que los funcionarios electorales del INE y TELPJ "actuarán con responsabilidad y congruencia al designar oficialmente a los “Diputados por Representación Proporcional” tras la votación del pasado 02 de junio de 2024".
El episcopado insiste en que en dicho proceso "se respete tanto 'la letra' como 'el espíritu de las Leyes'" para "evitar una injusta sobrerrepresentación de algunas fuerzas políticas"; aseguran que la Carta Magna mexicana establece "un equilibrio entre los legisladores de los distintos partidos y coaliciones, y este equilibrio debe ser honrado y mantenido".
En segundo lugar, el Consejo de Presidencia del Episcopado Mexicano pidió al gobierno federal encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador que se abstenga de intervenir o presionar a las autoridades electorales: "Solicitamos respetuosamente a las autoridades del gobierno federal que se abstengan de cualquier tipo de intervención o presión sobre las autoridades electorales en las decisiones pendientes".
A través de su mensaje, los obispos explican a los funcionarios públicos que "los principios fundamentales de equidad e imparcialidad democrática exigen que ninguna entidad gubernamental actúe como juez y parte en este proceso vital para nuestra democracia".
Los obispos piden un Congreso "verdaderamente representativo" y exhortan a todos los partidos políticos a "actuar con congruencia, respetando tanto 'la letra' como 'el espíritu' de nuestras leyes"; y piden una sana convivencia entre las voces representadas por las minorías y las mayorías políticas.
Finalmente, los obispos hacen un llamado al pueblo mexicano a unir fuerzas y voluntades en torno a la democracia: "Es vital que nos mantengamos atentos a la conformación de un Congreso que refleje fielmente la pluralidad de nuestra sociedad".
En su mensaje reiteran la petición al INE y al TEPJF: "Confiamos en que velarán por una representación equilibrada que respete tanto a 'las mayorías' como a 'las minorías', evitando así cualquier distorsión que pudiera afectar la integridad de nuestra democracia".
Para que la próxima legislatura se configure en "un Congreso verdaderamente representativo" y "espejo de la diversidad de voces y de la voluntad expresada por el pueblo mexicano en las urnas", los obispos concluyen con un llamado a la ciudadanía: "es nuestro deber mantenernos informados, participativos y vigilantes. Esta participación activa y responsable de todos los mexicanos es la que fortalecerá nuestro poder legislativo como un verdadero bastión democrático, donde cada ciudadano, independientemente de su afiliación política, pueda sentirse genuinamente representado y escuchado".