Brasilia, Brasil.- La presidencia de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB) emitió una nota el martes 11 de octubre en la que lamenta "la intensificación de la explotación de la fe y la religión como forma de obtener votos en la segunda vuelta" para las elecciones presidenciales de este año.
Los obispos no acusan directamente a ninguno de los dos candidatos que ganaron la primera vuelta electoral (el expresidente, Luiz Ignacio Lula da Silva o el presidente actual Jair Bolsonaro); sin embargo, recordaron que "la manipulación religiosa distorsiona los valores evangélicos y desvía el foco de los problemas reales que hay que debatir y afrontar en el país".
"Lamentamos en este momento de la campaña electoral la intensificación de la explotación de la fe y la religión como forma de obtener votos en la segunda vuelta. Los momentos específicamente religiosos no pueden ser utilizados por los candidatos para presentar sus propuestas de campaña y otros asuntos relacionados con las elecciones. Por lo tanto, la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB) lamenta y desaprueba tales acciones y comportamientos", dice la nota.
Los obispos piden "un auténtico compromiso con la verdad y el Evangelio" al tiempo de "condenar enérgicamente el uso de la religión por todos y cada uno de los candidatos como herramienta en su campaña electoral".
Finalmente el episcopado hizo un llamado a todos los ciudadanos: "a hacer de este momento una oportunidad de reflexión y de propuesta de acciones que apunten a la dignidad de la persona humana y a la búsqueda de una sociedad más justa, fraterna y solidaria".
El documento está firmado por Walmor Oliveira de Azevedo, arzobispo de Belo Horizonte y presidente de la CNBB; Jaime Spengler, arzobispo de Porto Alegre, primer vicepresidente; Mário Antonio da Silva, arzobispo de Cuiabá, segundo vicepresidente; y Joel Portella Amadoo, obispo auxiliar de São Sebastião do Rio de Janeiro, secretario general de la CNBB.